Después de un día caliente por la renovación de Riquelme, hoy la práctica fue con partidos en espacios reducidos y en un clima de tranquilidad. Se espera por la llegada de Fierro.
Lo único que falta para la firma de Riquelme es la reunión entre los abogados del jugador y del club para ultimar detalles. Y como si fuera la paloma de Noé, la aprobación del contrato de Román trajo la tranquilidad y el sol al arca de Borghi: después de la tormenta, el entrenamiento de Boca volvió a la normalidad y, por primera vez en mucho tiempo, se habló de fútbol.
Los ejercicios se basaron en partidos en espacios reducidos entre tres equipos distintos, en medio de un clima distendido. Por la tarde, los jugadores que no fueron parte del encuentro ante Godoy Cruz harán doble turno. Riquelme no se presentó en la mañana por Casa Amarilla, pero se espera por su firma a la tarde. Mientras tanto, Fierro tampoco apareció por La Boca: aún resta la aprobación del seguro por parte de los abogados del club. Quedan temas legales pendientes, pero Boca nuevamente se dedica a lo que debe hacer: fútbol.
Fuente: Ole.com.ar
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